Ráfagas cortas de ejercicio

Las autoridades abogan por hacer ejercicio de cuarenta y cinco minutos a una hora al día (media hora para los inexpertos) para perder peso y estar en forma. Sin embargo, si eres como muchas mujeres, no siempre tienes un cubo de treinta a sesenta minutos al día para comprometerte exclusivamente a hacer tus ejercicios. 

 

Todavía puede hacer ejercicio, simplemente necesita colarse de la misma manera ingeniosa. "El tema es mantenerse en movimiento", afirma un experto en acondicionamiento físico. "Obtenga un teléfono inalámbrico o coloque un cable largo en su teléfono normal, y camine cuando hable. Descubra lo que sea que le funcione y simplemente muévase. Estacione a media milla del centro comercial y camine. Tome la escalera en lugar del elevador. Esas cosas pequeñas y pequeñas se acumulan ". 

 

Para que no crea que las breves explosiones de actividad tienen un efecto insignificante en su programa de ejercicios, piense de nuevo. Un informe escrito descubrió que las mujeres que dividieron su entrenamiento en incrementos de 10 minutos eran más propensas a hacer ejercicio de manera consistente, y perdieron más peso después de cinco meses, que las mujeres que entrenaron durante veinte a cuarenta minutos a la vez. 

 

En un informe escrito histórico, un fisiólogo del ejercicio pidió a hombres y mujeres que terminaran 15 rutinas de ejercicio de 10 minutos semanalmente. Después de solo veintiún días, la aptitud aeróbica de los voluntarios era equivalente a la de las personas de diez a quince años más jóvenes. Su contundencia, resistencia muscular y flexibilidad eran equivalentes a las de los individuos hasta veinte años menores. 

 

Incluso en otro estudio, los investigadores descubrieron que para mejorar la salud y la forma física en adultos inactivos, muchas explosiones cortas de actividad son tan efectivas como los ejercicios más largos e integrados. Sería valioso para las personas salir de la mentalidad de todo o nada de que, a menos que entrenen durante media hora, están perdiendo el tiempo. 

 

Dividir el ejercicio en pequeños trozos en sus días sobreprogramados también puede mantener su confianza. Saltarse el ejercicio por completo es 'desmotivador': te sientes triste y culpable. Si lo omites, tiendes a imaginarte: '¿De qué sirve? No puedo sostenerlo de ninguna manera. De todos modos, siempre y cuando hagas un pequeño esfuerzo diario, eso te motiva a seguir adelante. El éxito genera éxito. 

 

Sin embargo, tenga en cuenta que las breves ráfagas de ejercicio tienen como objetivo complementar, no reemplazar, su rutina de ejercicio normal.