Presupuestos para finanzas de emergencia

Se considera que las finanzas de emergencia son esenciales en lo que respecta a la seguridad financiera, ya que puede proporcionarle recursos financieros a los que uno puede recurrir y de los que depende cuando surge una emergencia, como cuando uno está enfermo y tiene la carga de pagar enormes facturas médicas. , o casa imprevista o reparaciones importantes de automóviles. 

 

Cuando uno no tiene un fondo de emergencia, puede verse obligado a contraer deudas con una tarjeta de crédito que puede llevar varios años pagar con intereses que luego costarían mucho más. De todos modos, al poner de 30 a 50 dólares adicionales mensualmente en una "cuenta de ahorro de emergencia" individual, se puede asegurar con qué emergencia podría traer el futuro. Al hacer esto, se recomienda que uno vea el fondo de emergencia como otra factura, que se pagará puntualmente mensualmente. 

 

Sí, uno puede y debe presupuestar y asignar el dinero adicional para el fondo de emergencia, ya que esto es realmente importante cuando uno se refiere a su "futuro financiero". Aquí, el objetivo es producir ahorros mediante el presupuesto de su dinero; idealmente, los ahorros de emergencia deberían ser iguales a al menos 3 meses de sus gastos de vida. 

 

Lo crucial es que debe guardar constantemente una suma particular de dinero, y solo utilizarla para verdaderas emergencias. 

 

No es como una inversión, el éxito de los fondos de ahorro a largo plazo no cuenta realmente con la cantidad de rendimiento o intereses, sino con dejar de lado una suma fija de dinero de manera constante y constante para tener acceso rápido a él en todo momento. 

A pesar del estado financiero de uno, el paso inicial en el proceso de construcción de un fondo de emergencia es reconocer dónde se están gastando o gastando actualmente sus ingresos. 

 

Cuando uno se da cuenta y determina dónde se gasta el ingreso neto, será sencillo elegir y decidir dónde reducir los gastos. Dicho de otra manera, presupuesto. 

 

Presupuestar es poner o reservar ingresos para la utilización futura anticipada e imprevista. Es aquí donde uno establece una meta para salvar. Por lo tanto, establezca un fondo de emergencia como su objetivo. 

 

El monto ahorrado en el presupuesto puede ir a su objetivo de ahorro, fondo de emergencia o ambos. Uno puede usar el dinero ahorrado al presupuestar gastos financieros al guardar la mitad en su cuenta de ahorros y la otra mitad para emergencias. De esta manera, logra sus objetivos de ahorro y al mismo tiempo pone fondos para la utilización de emergencia.